La meridienne. Jean François Millet.
El heno está tibio, pincha un poco. El olor a sudor se mezcla con los alientos frescos de la sidra tomada en el almuerzo. Aliento de manzanas ácidas recogidas en otoño, pirámides rojas salpicando campos contenidos entre piedras de granito. Los pies resecos de tierra, hinchados de tanto caminar, descansan al sol. Un sueño plomizo anestesia las espaldas encorvadas desde el amanecer. La paja huele a trigo, a pan recién horneado.
Unos niños juegan en la era, la brisa transporta sus risas.
Una libélula emprende un vuelo bajo, roza muretes donde se enredan zarzamoras cubiertas de bayas moradas y flores silvestres. El cuerpo frágil se eleva. Sobrevuela landas rosas de brezo, verdes de helechos donde caballos salvajes y blancos trotan, las crines al viento.
Huele a marea. El aleteo se vuelve febril. Un mosaico de pigmentos azules y violetas se despliega en abanico. Un reflejo plateado ondea bajo el agua. Un cormorán se deja caer en picado abriendo la mar en un fogonazo de espuma.
Tras las alas transparentes, el sol se fragmenta en partículas minúsculas, ondas circulares en continua expansión .
La siesta de Vincent Van Gogh ( Van Gogh, que se consideraba discípulo de Millet, se inspiró de la «Méridienne» para pintar «La siesta»).
Anne, ¿te das cuenta de que ha descrito un instante? Tu relato, tan bien ilustrado por Millet y Van Gogh, es como la descripción minuciosa de una pintura, de algo que apenas tiene movimiento (el de los ojos del lector-espectador), aunque cierta agitación interna se intuye en tus pinceladas (los niños que juegan fuera del campo visual, en el era, desde donde llegan sus risas; el aleteo de una libélula que apenas se aprecia en el cuadro, aunque esté muy presente en él, a causa de su escaso tamaño…). Todo muy liviano, tan apacible que parece que no pueda ser.
Y acabas muy poéticamente tu descripción con unas bellas palabras poéticas en las que la levedad persiste: «Tras las alas transparentes, el sol se fragmenta en partículas minúsculas, ondas circulares en continua expansión».
Dejas pues, en el lector, una imagen fija que va adquiriendo vida subconscientemente. Una bella bienvenida al recién estrenado verano, a la época en que suele dejarse de lado el estrés y que invita, como en las obras de Millet y Van Gogh, a una prolongada siesta postmeridiana. Todo así, levemente…
A veces las palabras ayudan a comprender mejor una imagen.
Y a veces una versión pude casi superar el original.
Feliz verano para ti y gracias por la invitación a la siesta que me hace falta.
Salut
Albert, que bonito comentario! como soy de naturaleza contemplativa, (suena mejor que vaga!), en verano me encanta tumbarme en la hierba, cerrar los ojos, escuchar y oler como si fuese ciega. Como tengo la inmensa fortuna de no serlo, los colores me vuelven con fuerza y a la vez matizados. Millet nació en una aldea, Gruchy. Gréville Hague, cercana al pueblo donde veraneo desde pequeña. Su pintura tiene muchas reminiscencias de su infancia, y como conozco esta región comme ma poche, (lo digo en francés por no conocer la expresión castellana), su pintura pués, me resulta muy íntima.
Un abrazo,
Micromios, te agradezco tu amable comentario. El verano se presta a las siestas que a veces buena falta nos hacen para romper el ritmo y renovarnos. Así que muy feliz verano y mejores siestas.
Un saludo,
Después de leer el comentario de Albert no sé bien qué decir. Me ha gustado mucho. Mucho. Me has acercado a las sensuales siestas de las tardes de agosto. Gracias. Feliz verano, Anne.
Una postal de este cuadro de Van Gogh comparada en Orsay forma parte de una pequeña colección pegada en la puerta de mi armario en el estudio. Cuando estoy cansada giro la silla, la contemplo un rato a modo de siesta, antes de regresar a la realidad. Un cruce más …
Precioso enlace entre Millet – Fatosme – Van Gogh.
Gracias repetidas. Un abrazo.
PD. Creo que la expresión en español más habitual sería «como la palma de mi mano».
Querida letras, muchas gracias por tu comentario. En Orsay donde compraste la postal hubo una exposición Millet/Van gogh, en el 98, absolutamente maravillosa. Tengo el catálogo en casa, si pudiera te lo prestaría, pero se me antoja un poco complicado! En una carta a su hermano Theo, Van Gogh hacía esta reflexión sobre Millet: «Millet es Millet el padre, es decir que es guía y consejero en todo, para los pintores jóvenes.»Como Millet es pintor nacido en mi terruño, que conozco como la palma de mi mano, ¡gracias! le hago publicidad en mi blog, mi terruño virtual.
Abrazos cruzados,
Un texte très agréable accompagné de deux belles œuvres d’art, je suis plus friands de lecture peinture, parce que la peinture de l’interpréter à votre façon, au lieu de lire vous guide et vous fait rêver.
Millet Van Coghead un enseignant maître, une Française Anne Fantosme belle très intelligente et respectueuse commentaire avec une plume comme d’autres pas de demi baiser de ce lecteur une humble
Sansballes, je fais des commentaires d´oeuvres d´art que j´interprète à ma façon, impulsive et sensuelle, sensuelle dans le sens que j´essaie de sentir la peinture. Je ne pense pas être un guide très orthodoxe!
Cher Sansballes, veuillez recevoir mes salutations les plus sincères.
Querida Anne, bello e inspirador como de costumbre. El arte y tus letras se confunden en ritmos ocultos apenas palpables.
Impecable tu descripción. Por un momento he escapado de la lluvia y me he ido a meter de bruces al campo, entremedio del heno y el calor de la tarde.
Un abrazote y miles de gracias por el viaje 🙂
Querida chrieseli, si te fijas en el lienzo de Millet hace mucho peor tiempo que en el de VanGogh! Normal, el primero se inspiraba de sus recuerdos infantiles enraizados en mi lluviosa Normandia y el segundo pintaba bajo el sol de Provenza. Me alegro que, por un momento, te hayas escapado de la lluvia.
Un abrazo,
Que belleza en estas palabras sentidas que nos trasladan a la vida sencilla olvidada en las ciudades. Palabras que se elevan como alas de libélula entre el campo y el cielo. Y los cuadros tan parecidos y tan separados por la fuerza de una mente convulsa.
Un saludo
Concha, creo que a estos dos pintores les unía el amor a la naturaleza, a la vida campestre. Millet era un pintor excelente, Van Gogh un genio.
Un saludo y gracias por tus palabras,
Me resulta curioso leer «Feliz verano» por un 21 de junio, día en que desde pequeña, se que empieza el frío más crudo del invierno…esas cosas de la disposición de los continentes…yo veo 3 cuadros hermosos, el de Millet, el que vos pintás con palabras y el de Van Gogh. Un juego de colores, una transmisión de sensaciones más allá de las imágenes…3 obras de arte deliciosas. Gracias Anne!. Me encantaron las tres. Un abrazo.
Claudia, es que a veces soy un poco corta, me parece que como en estas latitudes ha empezado el verano, es verano en el mundo entero!
Gracias por ponerme en la misma linea que Millet y Van Gogh, pero estoy en un valle y ellos desde el Olimpo ni me perciben!
Un abrazo,
Anne. Sabiendo que eres de Normandía solicito información. ¿Es en Normandia donde se encuentra la Pointe du Raz? ¿O en Bretaña? Mi apellido es Raz pero nadie en este país parece capaz de decidir sobre el origen del mismo. Más cruces! 😉 Abrazos.
Letras, la pointe du Raz se encuentra en Bretaña en el Finistèrre. Pero también al lado del pueblo donde nacío Millet y de otro vecino donde murió Prevert se encuentra otro Raz, llamado le Raz Blanchard pero indudablemente el más conocido es el bretón. Este verano intentaré averiguar algo sobre el apellido Raz si existe. Abrazos, bretona!
Ellos no, pero nosotros si 🙂 …qué es eso de corta?! Nadie va a coincidir con vos en eso! Es ubicación a tu tiempo y espacio,nada más!!
Yo me impresiono facil porque recién estoy con el alivio del invierno, y de solo escuchar «verano» otra vez…ya me falta el aire de nuevo…Un abrzo fuerte!
Claudia ni yo mismo coincido con lo de corta! Es una forma de hablar, aunque para algunas cosas soy bastante negada! A ver si escribo, para vosotros que vivís en otras latitudes una entrada titulada «¡Feliz invierno!». De todos modos estar al lado de la chimenea tiene su encanto, por lo menos a mí me encanta. Abrazos.
Si por desgracia yo fuese una persona ciega, me gustaría que estuvieses muy cerca de mi. Podría entonces oler el trigo, saber de su color, adentrarme en el tenue colorido de los mundos que tu evocas. Percibiría entonces, hasta la libélula entre las zarzamoras…
Precioso texto, Anne.
Piper, estoy emocionada con lo que me has escrito. Pero, fíjate, estoy por apostar que cualquiera de vosotros y tú en particular, cerrais los ojos para sentir mejor y percibir de manera más sutil el mundo que nos rodea.
Un texto que no le pide nada a dos grandes pinturas. Los datos de las pinturas son una revelación. Por unos instantes me sentí transportado a esa siesta, esos momentos en que el sol agota y se necesita un descanso. Saludos nuevos… José
No sabes José, que alegría me da ver tu cara y conocer tu nombre! Gracias por tus palabras, y si sigues de vacaciones te deseo unas muy felices siestas.
Un saludo muy cordial.
Hace bastantes publicaciones que no dejo un comentario por acá, he estado pendiente de las actualizaciones pero no he tenido comentarios. Me gustó mucho la relación con las dos pinturas, no sabía la historia pero desde que las vi pensé que alguna relación tenían que tener. La descripción me gustó, me gustaría releerla buscando las definiciones de algunas palabras porque creo que así entendería algo más, algo oculto a una simple lectura.
Saludos,
Juan
http://jpvillais.wordpress.com/ (Me han animado a dejar este enlace por donde pase, es un blog independiente de Casi un objeto pero de la misma persona de Casi un objeto)
Juan Pedro, me alegro que te haya gustado el post.
Por mí deja los enlaces que quieras, no me molesta en absoluto sino todo lo contrario.
Saludos,
Nunca el verano fue mejor recibido. Al placer por su llegada, tanto tiempo esperada, se une el de tus palabras, las sensaciones que consigues despertar en todos nosotros al leerte, y aún es mayor al dejarnos mecer por la poesía de tu texto. Emocionante.
Las imágenes idóneas, y curiosamente, me atrae la obra de Millet, ya que personalmente me siento fascinado por los componente de la Escuela de Barbizon. Hace un tiempo colgué un cuadro en mi blog de uno de sus componentes menos conocido, Julien Dupre, quien también retrata momentos y escenarios similares. Por si te intersa te dejo el enlace:
http://ernesto51.wordpress.com/2010/02/07/con-sabor-chileno/
un placer siempre dejarse llevar por todo lo que nos regala tu espacio.
Un abrazo.
Ernesto, gracias por tus palabras, me hace feliz que te guste Millet. A mí también me gusta la escuela de Barbizon, un pueblo encantador por cierto, por lo menos cuando fuí, hace treinta y pico años! No recuerdo a Julien Dupré, gracias por el enlace. Por cierto, por si te interesa a Millet, lo ayudó Rousseau, otro gran naturalista, a sobrellevar la penuría económica que asolaba al pintor los últimos años de su vida.
Un abrazo
Fiel a tu estilo, emprendes tu vuelo imaginativo y con palabras cual pinceles detallas la escena y rompes el blanco con colores pastel, dando al escenario un impresionismo fabuloso.. un abrazo grande Rub
Rub, intenté escribir un texto liviano para no estorbar los cuadros. un abrazo,
Penso que este teu texto está mais perto de VAN GOGH embora a tua escrita esteja normalmente mais perto de J F MILLET. Poderá a alma de uma mulher da Bretanha ter a luz do sol de Van Gogh ?
Seria interessante estudar , pela luz (cor) e pelas sombras, a hora do dia em cada tela e intuir dos estados de alma dos dois pintores.
xico, has cometido un error muy grave, soy NORMANDA y no bretona! Bromas aparte, claro que una mujer normanda puede sentir con mucha intensidad la luz de Van Gogh. Siempre me pareció que la fuente de la luz nace en un pliegue del alma. Creo que Millet y Van Gogh tenían un alma inundada por una misma luz, divergente, fluctuante, no sé muy bien como expresarlo, pero en todo caso convergente en un mismo pliegue donde luces y sombras se funden en sentido al estado puro. Creo que me he hecho un lío!
Un abrazo,
De rostro cubierto y prostrado de rodillas voy…
Do que conheço , ficou-me da Normandia uma maior sensação de horizontes abertos, de liberdade. A Bretanha pareceu-me como que mais virada para dentro de si própria ( como um «gusano de seda», como escureceria a musica de Beethoven se fosse escrita por Brahms)
Contudo, continuo a pensar que podendo a alma ser normanda , muita da tua escrita parece bretã (ou o que um estrangeiro imagina num bretão: o nevoeiro e a chuva a esconderem horizontes, o assobiar do vento frio a acordar imagens…a necessidade de interiores de conforto.)
xico, a decir verdad mi familia es originaria del «Cotentin», una parte de Normandia muy parecida a Bretaña por su proximidad, su geografía, sus costumbres. Nada que ver con la Normandía más conocida y más amable donde se encuentran,Trouville, Deauville, Honfleur.
Mi Normandía es más salvaje, sacudida por vientos y mareas, llena de leyendas y de brujas. Y…has dado en la diana, mi casa es muy acogedora y confortable para compensar los rigores del clima.
Un cordial saludo,