I remember. Liu Xiafang.
Estaba empezando a caer la noche cuando me senté delante del escritorio dispuesta a escribirte. Saqué del cajón el papel de cartas, cogí mi pluma, desenrosqué el capuchón plateado del cuerpo negro, apoyé el plumín sobre la hoja, deseosa de convertir mi pensamiento en palabra. El papel se quedó en blanco. Después de sacudir la pluma, apoyar de nuevo el plumín sobre el papel con idéntico resultado me tuve que rendir a la evidencia, el depósito se había quedado sin tinta, contratiempo que me enervó. Alargué el brazo izquierdo hasta alcanzar el tintero situado en una esquina de la mesa. Con la mano derecha giré la tapa con un movimiento tan brusco que el bote, en equilibrio encima de mi palma alzada, se cayó de medio lado. La tinta se derramó entre mis dedos hasta formar encima de la hoja un charco azul con un centro oscuro como un pozo, redondo como una pupila.
La niña observa consternada como después de hundir demasiado su pluma en el tintero de loza blanca incorporado al pupitre, una gota de tinta cae sobre la tapa del cuaderno que acaba de abrir. Con gesto furtivo esconde la mancha bajo el papel secante. Sujeta la pluma con tanta fuerza que se le queda incrustada en el dedo corazón. Empieza a moldear letras. Las puntas de sus trenzas rozan el pupitre. Se aplica en imitar el modelo dibujado al principio de la línea, en que la tinta no se corra. Se concentra tanto que sus ojos bizquean. Las letras no le salen redondas y pulidas sino torcidas y llenas de aristas. Suspira, la pluma en suspenso. Vuelve a mojar el plumín dispuesta a proseguir la tarea. Una gota de tinta cae de nuevo pero esta vez encima de las letras. Una mancha con forma de nube las esconde. La niña se sube encima y sueña.
Sueña que las letras le salen perfectas, que está sentada delante del escritorio de su madre, sueña que escribe una carta con una pluma negra de capuchón plateado. Sueña que te escribe, que el tintero no se ha caído, sueña que tiene algo interesante que contarte. Y lo único que se le ocurre escribirte es que cuando llega Septiembre, el tiempo perdido se aglutina a su alrededor como una mancha reseca con olor a tinta y se siente un año más vieja.
Un abrazo Anne desde Perú, de esta lectora colombiana, que ya extrañaba no ver mas tus escritos y hasta ahora no tener respuesta a los mios.
Me encanta tu blog.
Eugenia
Eugenia me encanta la diversidad así que me encanta tener una lectora peruana que viva en Perú a quien le encante un blog escrito en español por una francesa. Si tienes un blog indícame como acceder a él para leerte.
Anne,
Este relato me sabe a las añoranzas de otoño.
Tinta es tinta.
Fanou, me alegro mucho verte por mi blog, ¡he dicho verte a consciencia! Te echo de menos así como a Eduard, mis primeros compañeros de WordPress, los primeros en animarme. La tinta es tinta, no se borra facilmente.
Un texto magnífico, Anne, magnífico… Y es que cumple con todos los requisitos para ser adjetivado así: un estilo preciso y sugerente junto a unas imágenes impregnadas de poesía, emociones y sensibilidad. Te felicito sinceramente.
Recibe todo mi afecto y admiración.
Luis te agradezco el adjetivo y la felicitación. Es una recompensa estupenda que recibo con ilusión.
Un saludo afectuoso,
Me ha encantado el paseo entre el ayer y el hoy. ¡Lo que siento es que me he quedado sin carta!
Un saludo
Jota, no tenía sus señas! De todos modos internet es una manera de comunicación menos literaria pero mucho más cómoda!
Un saludo
Estupendo relato que nos sumerge en un tintero para salir llenos de poesía.
Salut
micromios, el olor a tinta, por lo menos para mí, es un olor lleno de nostalgia y oesía.
Un saludo,
¿Ves? Esto ya es otra cosa. Bien hecho Anne.
Amigon, gracias a tus consejos, profe.
Coincido con Luis, un texto estupendo Anne, escrito para hacer sentir, para visualizar, para soñar… y además, con la magia y fascinación que produce en los que saboreamos sentarnos frente a una hoja en blanco, bien pertrechados de estilográfica, y hacemos un ritual de cada movimiento, desenroscar la capucha de la pluma, dejar resbalar el plumín sobre el papel inmaculado… un placer.
Gracias por todo ello. Un beso.
Ernesto, para los que nos gusta escribir, la magia ¡que a veces puede convertirse en negra!, es un ritual muy sencillo. Una hoja en blanco y una pluma. Magia acompañada de la felicidad impagable de compartir mundos llenos de misterio con personas de la misma condición.
Gracias y un beso,
Me encanta este relato en el que derrochas imaginacion en forme de tinta china y la imagen perfecta. Un saludo
Concha, bonita imagen la que sugieres. Gracias.
Un abrazo,
Me gustó mucho Anne!! Tanto como la imagen.
Es como un buen perfume (francés obvio!) en el que la fragancia envuelve agradablemente, y uno se empeña en descubrir las notas con las está hecho: poesía, prosa, realidad, fantasía, hoy, ayer…preciosa y agradable fragancia escrita querida Anne! Un abrazo fuerte!
(Ah!, se es un año más «experta» querida Anne. Besos)
Claudia, que la elaboración de mi texto te haga pensar a la de un perfume es una metáfora que me encanta! Me siento muy halagada.
Un abrazo de una mujer muy experta!
La hoja en blanco, la pluma , la tinta y los sueños, con tan poco se puede construir tanto. Como este bello texto. saludos
minicarver, solamente con sueños se pueden construir mundos, tú lo sabes. Te agradezco el cumplido.
Un cordial saludo,
hay un pretérito que marca lo que una niña siente en un presente. Ambas niñas coinciden en que hay días que es mejor no escribir cartas y que es mejor ante el derrumbe encender la imaginación viendo figuras azules que semejan poesía y vida, aunque después la vejez de un año aletee. un abrazo Rub
Los niños se proyectan en el futuro mientás los adultos bucean en el pasado, en algún momento se cruzan, no crees? Un abrazo querido rub y sobretodo cuídate en presente.
Anne, ¡qué texto mas bonito! Me encanta como vas y vienes en el tiempo. Cómo esa mancha de tinta, ese pozo, esa pupila, esa nube, es el motivo, el vehiculo para viajar y nombrar el tiempo. Bello.
Hola Ana Maria, el tiempo y sus meandros es un terreno que me gusta explorar. Gracias.
Un saludo,
¡Que hermoso Anne! Adoro el olor a tinta. Intenso, evocador. Como tu sueño. He soñado con esa niña y en su sueño yo escribía con plumín y en mi tintero cabían los sueños más hermosos que se puedan construir.
Un aplauso a tu sensibilidad.
Gracias por pasar Piper, es una pena que el olor a tinta se haya convertido en ficción.
Yo a veces sueño que escribo con tinta negra sobre papeles amarillos, pero cuando paso cada hoja todas vuelven a estar en blanco…
Carne de psicoanálisis! Jejejeje.
Saludos , Anne!
MX, visto lo que escribes no te lo crees ni tú!
Un saludo,
no puedo dejar de mirar la foto!!!
el texto es muy lindo tambien, pero la foto casi no me deja bajar…
martin K, gracias por pasar! Puedes encontrar muchas fotos de este artista en Google.
Chegado de férias começo por este texto.
Anne , podes sentir-te um ano mais velha , mas tambem podes sentir-te com mais um ano «VIVIDO». Gostaria seja esse o teu pensamento Longe os tubarões brancos..
Mais, gostaria que lesses (ou relesses) de «Nouvelles Orientales» de M. Yourcenar o conto » la salvation de Wang-Fô» e entendesses o que pensei.
xico, me alegro leerte de nuevo. Eres un hombre muy culto y muy leido. Estoy apuntando los títulos de las obras que me aconsejas. Espero que después de leerlas, cada mes de Septiembre me sienta alegre por haber vivido un año más y no nostálgica por sentirme más vieja. Gracias xico.
Un abrazo,