Fotografía Virginia.H. Diaz.
toda estremecimiento y oro,
soy tu flor que tiembla
sobre un tallo demasiado fino
cuyos pétalos se inclinan
dentro de un hedor que, de tan dulce,
parece cristalino,
pero que sin embargo me derriba,
como esos templos asiáticos
triturados por el yugo,
monstruoso y tenaz,
de la jungla que nos siseaba,
nos cercaba,
subterránea de muerte;
no me enteraba de nada,
para qué, después de todo,
para qué, si me cogías de la mano,
si tu piel era cálida y suave;
no, de verdad,
no me enteraba de nada
Versión francesa.
toute de frissons et d´or,
je suis ta fleur qui tremble
sur une tige trop fine
dont les pétales s´inclinent
dans une puanteur si douce
qu ´on la dirait cristalline,
et qui pourtant, m´effondre,
comme ces temples asiatiques
broyés par le joug
monstrueux et tenace,
de cette jungle qui nous bruissait,
nous encerclait,
souterraine de mort,
je n´y comprenais rien,
pourquoi, d´ailleurs?
si tu me tenais la main,
si ta peau était douce et chaude;
non, vraiment,
je n´y comprenais rien
Que esplendida sensibilidad! y ya que estamos muchas gracias por tu follow en anderonedream seguiré en contacto. Me han gustado las vibraciones de tu blog. Saludos
Muchas gracias, Ander! Nos seguimos entonces!
Bello poema querida amiga. tu voz cercana a la flor doblada. Tu voz dolorosa cuando el peso milenario se derrumba. Door de adentro… Besos y rosas.
Gracias, querido doc. Ya sabes tú lo que pesa la vida.
No sabía que habías vuelto. Por casualidad he visto tu post (¿se dice así?) del día 27, donde ya te he dejado un comentario. Me ha encantado este poema tan «tuyo», tan suave, tan sencillo, y tan profundo «je n’y comprenais rien, porquoi d’alleurs? Si tu me tenais la main. ¡Es precioso!.
Me han dicho en FB que me traduzco, de forma inconsciente del francés y creo que es verdad… doble trabajo para peor resultado… no comment! Gracias de todos modos.